De regreso al blog.
Gente! Después de una prolongada ausencia, ya que la escuela satura mi tiempo, he regresado a esto de la actividad ecléctica. Y en esta ocasión les dejo una extracto de mi libreta de 'poesía', un fragmento de la redacción que hice a partir de una escena en mi ciudad, en la que trato de plasmar como nuestros infantes indigentes sobreviven a la hostilidad de las calles.
Sin más que agregar, me despido, esperando escribir más seguido. Cuídense, Paz y Respeto!.
[...]
Qué irónico es el destino,
pues con el corazón partido
nuestro infante, ahogado en tristeza y soledad,
desamparado e indiferente ante la sociedad,
que aún con todo esto lo mira con frialdad,
se ha puesto a vender alegrías por un peso.
Y el peso de esta vida sin amor
lo ha puesto a pensar que no hay razón para amar esta vida.
Noches oscuras que resiente su débil estructura ósea,
sol asfixiante y agregarle resequedad en la boca,
se pregunta por que muchos en la misma situación buscan refugio en la droga.
Su libertad se ha resumido en tierra y madera,
su mayor ilusión es poder continuar la escuela.
Miradas de odio y desprecio en las aulas,
en el recreo no hay paletas ni juegos; nadie la habla,
y por la salida no hay quien lo reciba con un abrazo
...o quien le diga 'hasta mañana'.
[...]
En una calle oscura ve a su hermana adolescente en minifalda,
su inocencia aún busca el significado de 'vender sueños de cama',
No ha conocido el significado de la palabra amistad,
nada perezoso, pero es agradable dormir,
pues sabe que son más hermosos los sueños que su realidad,
nació, está creciendo, pero siente que está próximo a morir...
